Tras recoger a Ashley en el aeropuerto, nos dirigimos a una de las mejores zonas de caza de corzo de España.
Era la segunda vez que Ashley cazaba en España, pero esta vez experimentaría por primera vez la caza de montaña en España, ya que una vez que conseguimos terminar el rececho de corzo, nos iríamos a las montañas leonesas para intentar tirar un rebeco cantábrico.
Después de comer esperamos a que bajara un poco la temperatura, suponiendo que con tanto calor los animales estarían echados, y fuimos a intentar cazar el primer corzo español de Ashley.
Nada más coger la carretera que nos dirigía hacia la zona de caza, empezamos a ver los primeros animales, y una vez en el coto, apenas tardamos 5 minutos en localizar animales que ya cumplían con lo que ibamos buscando. Sin embargo, al tener por delante varias horas de luz, optamos por buscar algo mejor.
Tras dos horas de lo más entretenidas sin dejar de ver corzos, corzas, crías… optamos por asomar a una siembra en un sitio muy poco accesible donde solía haber siempre muchos animales debido a la tranquilidad que les proporcionaba aquel lugar.
Al poco de asomar a aquel valle, vimos una corza que parecía estar acompañada, ya que no dejaba de mirar hacia atrás.
Efectivamente, a los pocos segundos apareció el corzo y, tras valorarlo con el telescopio, confirmamos que se trataba de un animal que superaba con creces nuestras expectativas.
Nos acercamos unos metros y Ashley tiró al corzo, que salió corriendo deteniéndose unos metros después. Tras un tiro de remate nos acercamos, aprovechamos la carne y disfrutamos del gran trofeo que Ashley acababa de conseguir.
Enhorabuena por tu primer rececho de corzo en España.